miércoles, 25 de junio de 2008

El mundo continua

Tras varios siglos de convivencia entre las diferentes razas de verediths, los dioses empezaron a aburrirse y pensaron en ir dando vidilla a ése mundo que les habían concedido y empezaron a ir creando nuevas razas, con diferentes aspectos, formas de vivir, anatomías y poderes.
La raza más debil pero con un orgullo muy elevado fueron los Arkanos, seres más o menos equilibrados en un total, pero sin destacar en nada, bastante fragiles y que tenían una mentalidad un tanto neutral (debido a que sus compañeros de mundo eran mas poderoso)
Principalmente su aspecto es de orejas redondeadas, una media de 1,75 m, y piel rosada, pero con el paso del tiempo, el unirse con otras razas y exlorar nuevas zonas fueron aparaciendo nuevos arkanos, al igual que pasó con los verediths.
Curiosamente aparecieron 2 razas similares pero diferentes a su vez.
1º Fueron los Maderones que eran más fuertes que los arcanos, mas robustos aunque de un altura bastante reducida. Debido a su tamaño y su fuerza física los maderones se apartaron de la civilización arkana y se dirigieron a las montañas donde empezaron a crear sus poblados y se dedicaron a la forja de armas, armaduras y utensilios mejorados gracias a sus palabras mágicas talladas como hornamentación.
2º Otra raza que se creó fueron los Arsulianos, de una gran inteligencia y habilidad con las manos, empezaron a repudiar el combate cuerpo a cuerpo y la magia. Viendo que no tenían nada en común con sus similares los arcanos, ni en ideales ni en físico, ya que sus cuerpos tenían un tono palido verdoso al igual que su cabello, éstos decidieron marcharse hacia la zona del desierto, puesto que su organismo conservaba muy bien la humedad y no sudaban.
Aparentemente esta raza desapareció, pero unos pocos saben que en una zona han creado una ciudad dividida en 2 regiones, según rango social, y han desarrollado una técnica nueva llamada tecnología, en la que luchan mediante aparatos con engranajes y armas que lanzan proyectiles.

Algunos dioses crearon razas mitad humanoides mitad animal (Multiformes), con grandes dotes para lo que se propusieran, pero poco a poco fueron extinguiendose quedando unos pocos ahora.
Otros variaron algunas razas y les obligaban a alimentarse de la sangre de seres vivos (Vampiros), aunque también es una raza que está casi extinguida, ya que se creó una caza de vampiros que casi acabaó con ésta raza.
Similares a los multiformes aparecieron mezclas de animales con otras razas, pero con una fusión menos estética, ya que estaban divididos en zona animal y zona humanoide, creando así seres mitad pez mitad veredith, mitad caballo, mitad arkano, y cosas similares.
Algunos dioses aburridos del mundo terrestre, crearon unos seres a su imagen y semejanza que simplemente se dedicaban a observar a los habitantes de la zona inferior, ya que éstos vivian en el cielo, se llamaban Bareijos. Éstos seres de una belleza incomparable, piel bronceada, ojos brillantes y alados vivian en armonía creando una civilización muy culta y poderosa que acabó en la casi total aniquilación cuando entablaron una batalla milenaria contra los Kraslam, que eran seres bellos también pero de un aspecto más tenebroso y apagado.
Por último unos dioses en vez de crear razas, lo que hicieron fue dotar de inteligencia y longevidad a ciertos animales, que habitan casi desde el comienzo de los tiempos, y formando una gran variedad de animales inteligentes, que se han ganado un respeto entre todas las razas.
Así pues lo que empezó siendo un proyecto diferente acabó siendo una de las razas mas admiradas de todo el planeta. Los Dragones son inteligentes, y respetados por ello y por su poder mágico.

© Tamago Studio

sábado, 29 de marzo de 2008

Raza Veredith


Los verediths son la raza más antigua del planeta.
Hay 6 variantes de verediths bastante diferenciada.
Primero aparecieron los verediths reales y su versión oscura los verediths reales negros.

Los verediths reales de piel clara, con pelo generalmente lacio y de color luminoso.
Sus orejas son muy picudas por sus extremos superiores.
Son elegantes en el vestir y en el hablar con un fuerte sentimiento de la justicia.
Su longevos en vida y juventud, los verediths reales suelen vivir en lugares apartados, y en contacto con la naturaleza, ya que de ella sacan su poder mágico.

Por el contrario los verediths reales negros son de tez oscura y su pelo suele tener siempre un tono oscuro y sus orejas también son muy picudas en su parte superior, también tienen el don de ser jovenes eternamente y no morir de viejos.
El poder es lo que les motiva a vivir, y emplean todo lo que esté a su alcance para demostrar que están por encima de sus "hermanos" los verediths reales. No les importa luchar y usar artes oscuras, para conseguir sus propósitos, aunque también suelen vivir apartados en comunas de su misma especie.

Con el paso del tiempo fueron apareciendo nuevas razas y nuevas variantes de verediths.
Los verediths oscuros tienen el color de piel morado y sus orejas al contrario que los verediths mencionados, son con forma puntiaguda pero por su parte inferior.
Se parecen a los verediths reales oscuros en su filosofía de vivir, pero adquirieron una obsesión por el sexo en todas sus variantes y obligaban a todo aquel que entrara en sus dominios a participar en sus morbosas actividades, hasta que acababa muriendo, y aún así algunos verediths oscuros desarrollaron una morbosa aficion por tener ciertas tendencias sexuales con los muertos.
Mezclando sus pocos escrupulos, su mente retorcida y la habilidad que tienen para casi todas las artes, los verediths oscuros son unos seres muy diestros y peligrosos.
Aunque sean una raza rebajada de los verediths reales negros, conservan la habilidad de no envejecer y poder vivir eternamente.

Al igual que los verediths reales negros, los verediths reales también tienen una subraza con habilidades similares, los verediths Biwe.
Los verediths biwe, de piel clara y bronceada y de orejas gachas, siguen el camino del bien intentando convivir en paz con el resto de seres. Son mas diestros en el noble arte de la lucha que en el de la magia, pero se conocen bastantes verediths biwe magos con un poder muy grande.
Éstos seres están en contra de las artes realizadas por los verediths oscuros e intentan alejarse todo lo posible de sus terrenos, y suelen convivir en paz con otras razas sean de su especie o no.

Las dos útimas razas de verediths conocidas son los verediths arrantzel, de aspecto cetrino y escualido con las orejas alargadas y con forma de pico en su zona inferior, van bagando por el planeta sin relacionarse con el resto de seres. Son hermitaños y no les gusta mucho la compañia, pero algunos de éstos arrantzel se les puede encontrar en algunas grutas o montañas, o hasta en alguna corte real como consejeros, ya que se comenta, que perdieron el don de la inmortalidad, pero a cambio ganaron una sabiduria y facilidad para poderse adentrar en los vastos mares de del tiempo y poder predecir cosas aún por venir.

Los verediths grises son una raza bastante actual, por lo que hay pocos de éstos individuos, por lo tanto no se sabe mucho de su longevidad ni de sus habilidades.
En la batalla contra el dios del caos Garrenk, un simple veredith gris de nombre Geishuto, acabó con muchos ejército de los que se oponían a Garrenk, gracias a su don con la magia.

viernes, 25 de enero de 2008

La creación del mundo


Como casi todos los universos, al principio todo era oscuridad, una inmensa y profunda oscuridad, donde ningún planeta irradiaba luz propia.
Sin embargo cuenta la leyenda que en un planeta ocurrió algo imprevisto y para nada imaginable.

Un objeto poco a poco se fue creando. 
Ese objeto era de un material orgánico, que no se desplazaba por voluntad propia, ni tampoco necesitaba alimento. Poco a poco fue cubriéndose de adornos y símbolos extraños, y comenzó a emitir un ligero resplandor.

Un día ese objeto paso de emitir el ligero resplandor y a proyectar una luz muy potente nunca entes vista en este universo de oscuridad. Comenzó a vibrar y cambió de forma, como si se hubiera partido en dos mitades pero estando unidas todavía.
De cada una de las mitades emergieron dos figuras total mente opuestas.

La primera con un aspecto dulce, tranquilizador, y además irradiaba luz propia como la del objeto del que había surgido, y la segunda de un aspecto más siniestro y oscuro, que en lugar de luz parecía que emanaba un aura de oscuridad y maldad. 

Acto seguido las dos figuras empezaron a entablar una lucha sin medida, pero por lo visto estaban en igualdad de condiciones físicas, puesto que no conseguían ningún impacto, hasta que el ser que desprendía luz propia consiguió cegar al otro ser y provocarle una herida supuestamente mortal, ya que de ésta herida comenzaron a emerger otros seres similares.

Claramente en desventaja y superado en número, el ser de luz propia intentó hacer frente al grupo de seres que acababan de aparecer, y pudo  conseguir evitar los primeros impactos, ya que por lo visto, no tenían el mismo potencial que el original, pero obviamente al final consiguieron crearle heridas en su cuerpo, del que comenzaron a surgir otros seres con luz propia, al igual que había ocurrido con el ser oscuro.

Ya en igualdad de condiciones, prosiguió la batalla cada vez más violenta, puesto que cada vez habían más seres oscuros y brillantes, luchando y desdoblándose en otros seres de características similares. 
Sin embargo en medio de ese caos, algunos seres no se golpeaban, sino que eran absorvidos y fusionados creando seres diferentes a los que se habían visto hasta ahora.

Éstos nuevos seres no emitían ningún tipo de luz, pero tampoco tenían aura de maldad, por lo tanto al ver el espectáculo de la pelea entre seres de luz y oscuridad, se fueron apartando de la batalla, hasta que quedaron claramente tres grupos de seres definidos, puesto que ya no aparecían más seres de las heridas, y no se creaban seres neutros en la batalla.

Tras muchos siglos de batalla, algo hizo que poco a poco todos los seres dejaran de pelear. Ese algo era una especie de melodía que los impulsaba a separarse de la batalla y formar grupos según el rango de poder, estando los  dos primeros seres originales surgidos del objetos en el centro y el resto a su alrededor perfectamente formados.

Cuando todos estaban formados comprobaron que los seres neutrales estaban rodeando todos los grupos, dejando a los seres oscuros y brillantes encerrados. Justo en el centro de la formación y entre los dos seres originales comenzó a sonar cada vez más fuerte la melodía que los había inducido a ponerse en esa formación, y del suelo se elevó el objeto del que habían surgido los dos primeros seres.

La melodía paso a ser algo que parecía todos los seres conseguían comprender, y entonces... por vez primera... una voz surgió del objeto.
La voz había conseguido crear un lenguaje que todos los seres comprendieran y les relató:

- Me llaman Nora Soto.
Soy creador de toda vida existente y tengo el poder para destruir lo creado. 
Todo ciclo debe tener un equilibrio y así se ha creado. 
Tres grupos os halláis en mi presencia, el bien, el mal y la netrualidad que equilibra la balanza.
Todos los presentes  sois dioses de un mundo que he creado y en el cual rige una regla sencilla pero infalible.

El equilibrio.

A partir de ahora abandonareis el mundo en el que os encontráis para dejar paso a seres más sencillos y de menos poder que vosotros. Podéis crear esos seres, pensando en que hagan el bien, el mal o simplemente que habiten sin decantarse por ningún bando, siendo neutrales.
Pero os debo de recordar que si la balanza se decanta por un lado, y se rompe el equilibrio, volverá a repetirse lo que ha estado aconteciendo todo este tiempo, hasta que el equilibrio sea recompuesto.

Yo seguiré en éste mundo viendo como evolucionan los seres que creeis y si alguno me encuentra y aprende a usarme, podrá llamar hasta un total de tres de vosotros y al que tendreis que obedecer mientras pueda manteneos atados a éste mundo.
Así pues todos los dioses abandonaron sus cuerpos corpóreos, para empezar un mundo, en un principio equilibrado .